Otra prueba donde la naranaja mecánica estuvo presente, y eso que las previsiones meteorológicas eran preocupantes.
Al final el tiempo acompañó y los mas de 100 duatletas (repartidos en las 2 pruebas), pudieron disfrutar de una mañana soleada.
Comenzábamos con 2 vueltas de carrera a pie a un circuito rompepiernas, subidas y bajadas que hacían que el pelotón fuera desintegrándose en pequeños grupos.
Tras los 6km, llegaría el ataque al monte de la calabaza. Bonito paisaje con varias subidas, zonas de arena y senderos... endurecían los 20km de bici. Llegamos al último
segmento. Tres kilómetros de carrera, con una subida final que elevaba las pulsaciones.
Había que recobrar fuerzas y, aprovechando la gastronomía de la zona.... En fin... una imágen vale más que mil palabras...
Próximas estaciones... Duatlón Cross Medina de Rioseco, Maratón de Barcelona, Legua Palentina.
Bueno....bueno....otra cosa no pero al deporte gastronómico no nos gana nadie, ¡¡Que envidia!!
ResponderEliminarFelicidades chicos, buén trabajo.